viernes, 2 de septiembre de 2011

inercia oscura

estoy acá con ganas de escribir, pero no me animo, como siempre, no me animo a nada y sueño que hago muchas cosas... pero a pesar de todo hago cosas, mas no tantas como quisiera. me quitan las ganas tonterías que se comen mi tiempo todo, como el tránsito, como aquella mujercita que habla sin parar, como esa angustia de leer rápido y de pretender aprender en dos segundos todo... estoy en la ciudad maravillosa, que he disfrutado poco, y por qué no salgo? Siento que me despierto de un estado extremamente extraño que incluye vampiros, ETs, historias de amor fallidas, caos y mucha inercia. Tengo que reconocer que no soy un santo, y qué no se manejar mis supuestos pecados, no he matado a nadie, la verdad todo el tiempo me la paso asfixiando a mi propio ser.... por qué me dejó sin aire aquella acusación de huir de la vida, se despertó mi dragón, ese dragón que escupe fuego sobre todo porque dice que odia todo, que la culpa es de todos y que todo está mal, está equivocado, y que por eso todo debería acabar. Y estoy viendo como el lobo que soy está queriendo salir. El papel de bueno no funcionó, no tiene fuerza es una máscara, es un alguien que se quiere quedar estático esperando que la luz baje del cielo, pero solo me llevó al infierno frío... dónde había leído yo que mi sentimiento más profundo era el odio? de qué está hecho? Y entonces pienso en asesinatos, drogas, sexo, religión, mentiras, robos, en toda esa horda de animales autómatas... es solo encender la TV o la radio, o leer el periódico o hablar con alguien... ahora me doy cuenta de que mi compasión es casi nula, que este deseo de acabar con todo eso traspasa hasta a la muerte, cómo acabar con todo eso incluso después de acabado? quisiera que no quedara rastro ni oportunidad de que volviesen a aparecer entidades así ni a suceder atrocidades. Tal vez esto refleja el miedo profundo que fue sembrado en mi, en todos.

Algo pasó conmigo. Es esta personalidad que se resiste con todas sus fuerzas a no desaparecer y fue un alivio ver que no me estaba enloqueciendo cuando sentí que me botaría al carril del metro, es ella, supongo, que prefiere morirse antes de entender lo que es hacer un esfuerzo. Son ellos, que no lo pueden permitir (como los hombres grises).

Mi debilidad, creo que he vislumbrado ella.

y aquí aun no se despierta nada!!

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